
En su intento por amargarle la vida (y la muerte) a Noelia, los cristoflautas lo han intentado todo. Incluso se colaban en su habitación para llenarla de cromos de santos y amuletos varios. Cosas de la superstición. Solo por eso ya se merecen la cárcel, pero estos fanáticos, que van todo el día llorando por lo perseguidos que están, tienen tanta inmunidad como impunidad para acosar a los demás.
El miedo a la muerte de los cristianos es algo que siempre me ha fascinado. Si su amigo invisible ha decidido que ha llegado el momento y decide llevárselos a un lugar mejor, lo normal sería celebrarlo. Pero no, se lo toman a la tremenda.
Lo curioso es que, tan devotos ellos, confíen más en el derecho penal (de origen pagano) que en la justicia del dios que han construido a imagen y semejanza de su integrismo. Aun así, seguro que rezaron mucho, supongo que en latín, para amargarle la muerte a Noelia, pero de momento solo han conseguido añadirle sufrimientos. Se supone que dios sabe lo que hace y, si no mandó un rayo destructor para aniquilar a los que redactaron la ley de eutanasia, tan mala no le parecería. Ni siquiera los convirtió en estatuas de sal, truco que domina.
Otra opción, si es tan bueno, hubiera sido curar a Noelia de sus sufrimientos y hacerle recuperar sus ganas de vivir. Una opción que seguro no barajaron estos rezadores en serie. A ver si entran en razón, se da cuentan de que no le hace caso ni su dios, entregan el Aranzadi y se disuelven.
¡Qué buena tribuna! Leer en eldiario.es. Blog: Tu padre no puede solicitar tu eutanasia, ni impedirla.
El miedo a la muerte de los cristianos es algo que siempre me ha fascinado. Si su amigo invisible ha decidido que ha llegado el momento y decide llevárselos a un lugar mejor, lo normal sería celebrarlo. Pero no, se lo toman a la tremenda.
Lo curioso es que, tan devotos ellos, confíen más en el derecho penal (de origen pagano) que en la justicia del dios que han construido a imagen y semejanza de su integrismo. Aun así, seguro que rezaron mucho, supongo que en latín, para amargarle la muerte a Noelia, pero de momento solo han conseguido añadirle sufrimientos. Se supone que dios sabe lo que hace y, si no mandó un rayo destructor para aniquilar a los que redactaron la ley de eutanasia, tan mala no le parecería. Ni siquiera los convirtió en estatuas de sal, truco que domina.
Otra opción, si es tan bueno, hubiera sido curar a Noelia de sus sufrimientos y hacerle recuperar sus ganas de vivir. Una opción que seguro no barajaron estos rezadores en serie. A ver si entran en razón, se da cuentan de que no le hace caso ni su dios, entregan el Aranzadi y se disuelven.
¡Qué buena tribuna! Leer en eldiario.es. Blog: Tu padre no puede solicitar tu eutanasia, ni impedirla.