Marcela Padrón, de 63 años, había dejado todo preparado para morir. En el documento de Manifestaciones Anticipadas de Voluntad que había firmado en 2013 expresaba su deseo de que, en caso de enfermedad incurable o irreversible, le proporcionaran los tratamientos necesarios para paliar al máximo el dolor, el sufrimiento o la angustia extrema, aunque eso pudiese "acortar" su "expectativa de vida”. Marcela falleció el pasado 15 de marzo en Las Palmas de Gran Canaria después de cuatro días en los que padeció fallos en los riñones y en el corazón, sepsis e inflamaciones por todo el cuerpo. Un tiempo en el que estuvo amarrada a la cama del hospital sin recibir sedantes ni calmantes.
En 2013 expresó su deseo de que, en caso de enfermedad incurable o irreversible, le proporcionaran los tratamientos necesarios para paliar al máximo el dolor, el sufrimiento o la angustia extrema, aunque eso pudiese "acortar" su "expectativa de vida”.
¿Por qué no se respetó su Testamento Vital? Se pregunta su familia y nos preguntamos todos (cadena SER). Desgraciadamente, el paternalismo médico todavía está presente en la praxis médica, indiferente a los derechos de las personas y a su sufrimiento al final de la vida.
Octavio Toledo, El País, 20/4/2018
En 2013 expresó su deseo de que, en caso de enfermedad incurable o irreversible, le proporcionaran los tratamientos necesarios para paliar al máximo el dolor, el sufrimiento o la angustia extrema, aunque eso pudiese "acortar" su "expectativa de vida”.
¿Por qué no se respetó su Testamento Vital? Se pregunta su familia y nos preguntamos todos (cadena SER). Desgraciadamente, el paternalismo médico todavía está presente en la praxis médica, indiferente a los derechos de las personas y a su sufrimiento al final de la vida.
Octavio Toledo, El País, 20/4/2018